Resulta importante realizar un análisis en términos de sostenibilidad de las diferentes actividades de los seres humanos sobre el entorno.
Este análisis debe de tener en cuenta la transformación del medio que conllevan las actividades humanas y la capacidad de acogida del mismo; los recursos naturales empleados en función de sus tasas de renovación; y los efluentes producidos (emisiones, vertidos y residuos) según la capacidad de asimilación del entorno (capacidades de dispersión de la atmósfera, de autodepuración de las aguas y de filtrado del terreno).
El estudio de la variable ambiental supone analizar la relación de las personas con el medio, sus actividades y su incidencia en el entorno.
En zonas rurales las actividades del hombre y de la mujer suelen estar muy diferenciadas, teniendo cada uno de ellos un papel social y cultural determinado que representar. En ocasiones, la responsabilidad de la construcción de la vivienda recae en uno o en otro miembro de la familia. En estos casos es muy importante plantear programas constructivos que estén de acuerdo con las costumbres locales, a riesgo de poder hacer fracasar un programa en caso contrario.
También es importante conocer en qué época del año suele construirse, para realizar una programación adecuada. Por lo general, las épocas de construcción suelen estar definidas en función de la climatología local, pero con frecuencia conllevan connotaciones culturales o religiosas que es importante tener en cuenta.
La adaptación de las construcciones al clima local resulta un aspecto de gran importancia. Las soluciones constructivas tradicionales suelen incorporar materiales locales que responden adecuadamente a las condiciones metereológicas de cada lugar. Realizando un análisis de la arquitectura tradicional frecuentemente se encuentran soluciones apropiadas cuya utilización puede mejorar las condiciones de habitabilidad de las construcciones a realizar.
En cuanto a la relación del conjunto vivienda – asentamientos humanos – servicios con el medio será necesario analizar los siguientes aspectos:
El hábitat es la manifestación física del desarrollo de una sociedad. Las edificaciones que el hombre construye y habita son la representación de su propia cultura, de su manera de entender las cosas, de su escala de valores, de sus necesidades y aspiraciones.
Las características arquitectónicas de la vivienda deben ser consideradas como un conjunto cultural. La vivienda toma una definición formal en función de la sociedad en que se desarrolla, presentando un programa de necesidades y una superficie distinta según la zona en que nos encontremos.
Un planteamiento habitual en los programas de vivienda de bajo coste es la definición de modelos de vivienda basándose exclusivamente en la disminución de los costes económicos, generándose propuestas que poco tienen que ver con el entorno en que se construirán ni con la cultura y la forma de habitar de las personas a las que van destinadas. La vivienda no son sólo cuatro paredes, es el reflejo de las personas que la habitan, de su cultura, de sus actividades, de sus necesidades, de sus sueños.
Resulta también importante delimitar el marco de estudio, pues además de una serie de características comunes, la vivienda y el problema de la vivienda presentan también circunstancias específicas según la zona en que nos encontremos. Una diferenciación fundamental es la de los entornos rurales y urbanos, cada uno sujeto a una dinámica económica y social distinta.
Así pues, será necesario realizar un estudio de las características de la vivienda y su programa de necesidades como primera fase para el desarrollo de proyectos sociales de hábitat de bajo coste, para analizar cómo la edificación local resuelve los problemas tecnológico, ambiental y arquitectónico para el desarrollo del hábitat.
El problema tecnológico:
Resulta de gran importancia analizar, en primer lugar, el estado tecnológico en que se encuentra la zona en la que se va a situar el programa de vivienda, de cara a establecer unos primeros criterios para decidir qué técnicas constructivas pueden resultar más ventajosas.
El estudio debe hacer referencia a los siguientes aspectos:
Analizando las cantidades que se pueden emplear y sus tasas de renovación.
Para su transformación en materiales de construcción, valorando los costes energéticos y los efluentes que puedan conllevar tales procesos.
Analizando la procedencia de los mismos y las posibilidades de la zona, tanto desde el aspecto de costes económicos como en el de incidencia ambiental.
Diferenciando la especializada, técnicos de la construcción (albañiles, fontaneros, electricistas…) y la polivalente.
Resulta de gran utilidad la elaboración de una serie de fichas de materiales y técnicas de construcción accesibles en la zona de cara a la posterior toma de decisiones sobre la técnica más apropiada para el programa habitacional.
Para el estudio del hábitat es preciso que el concepto de Desarrollo Sostenible sea entendido no como el crecimiento de una zona determinada —crecimiento cuantitativo—, sino como un proceso de evolución, transformación o realización de capacidades, a través de las cuales se alcanzan gradualmente un estado mejor, es decir un mejoramiento cualitativo.
El análisis de un determinado espacio geográfico debe tener un enfoque integral y sistémico de tal forma que permita trazar planes, programas y estrategias de desarrollo en las regiones, localidades o centros poblados no sólo considerando las formas de uso de suelo, manejo de recursos y protección del medio ambiente, sino también considerando como elemento prioritario el aprovechamiento de los conocimientos y riqueza cultural del lugar a la vez de propiciar y alentar el avance científico y tecnológico de las técnicas y procedimientos autóctonos relacionados con la utilización de los recursos naturales, protección de la biodiversidad y preservación del medio ambiente.
Es importante considerar seriamente la relación que existe entre medioambiente y desarrollo sostenible ya que los factores medioambientales ejercen influencia sobre los sectores geográficos tanto como sobre los sociales. Es necesario resolver los problemas ambientales (contaminación, deforestación, erosión, etc.) por que contribuye directamente a mejorar la calidad de vida de las personas; el daño a la naturaleza no solo es un problema de «conciencia», sino también puede concretarse en dar sufrimiento, enfermedad o carencias a amplios sectores de la población ahora o en el futuro.
Cada una de las actividades que CEETyDeS desarrolla se orienta a cumplir con el objetivo de coadyuvar al desarrollo sostenible de la región andina; en este sentido, para llevar adelante el Programa Andino de Desarrollo Sostenible, se considera imprescindible desarrollar e implementar modelos o formas de trabajo a distinta escala y en distintos escenarios tanto rurales como urbanos. Las propuestas que en la actualidad venimos trabajando son:
El invernadero-compostero es un sistema de producción agrícola diseñado para zonas altoandinas. Consiste en dos sistemas complemetarios (invernaderos y composteros) integrados en un mismo espacio para lograr un beneficio mutuo, es decir por una parte los composteros que logran una mayor rapidez en el proceso de elaboración de compost debido al mayor calor y humedad, y por otra parte las plantas del invernadero que aprovechan el calor que se genera en los composteros (producto del proceso de transformación de la materia orgánica), especialmente de noche cuando bajan las temperaturas.
Cada invernadero cuenta con un área de 200 m2 y cinco composteros. La estructura geodésica de la cubierta se apoya sobre el anillo exterior y se realiza con varillas de madera y uniones metálicas.
Los composteros permiten la transformación de la materia orgánica que proviene del mismo invernadero y de cultivos próximos. El compost se obtiene luego de tres meses, es decir que cada compostero podrá producir compost 4 veces al año.
El diseño de esta estructura también cuenta con las siguientes ventajas:
DIA
NOCHE
Las pata-patas o terrazas de formación lenta es una tecnología utilizada por los antiguos pobladores andinos para cultivar en terrenos de gran pendiente. La implementación de políticas agrarias equivocadas trajo como consecuencia el abandono de este sistema de producción agrícola y el empobrecimiento del campo.
La recuperación de las pata-patas consiste en estabilizar y controlar la erosión de aquellos terrenos con pendiente pronunciada, a través de la conformación de “terrazas de formación lenta”, que se generan reforestando con plantas pequeñas, gramíneas o arbustos en los bordes de dichas terrazas, con objeto de habilitarlas para su cultivo en secano.
El primer trabajo consiste en definir los límites de cada plataforma trazándose líneas sinuosas siguiendo las curvas de nivel; luego se procede a formar los taludes con “champas” (terrones de tierra con raíces y plantas) y/o sembrando plantas que ayuden a conformar una “barrera natural” la misma que permitirá cambiar la pendiente de cada terreno y hacerlo cultivable.
Una vez que se conforman las terrazas se procede a realizar el “barbechado” (volteado de los suelos) de las pata-patas dejando los terrones de tierra con la materia orgánica hacia abajo y lograr, de esta manera, suelos más fértiles y listos para su sembrío.
Esta técnica se implementa en zonas altoandinas donde no existe riego durante todo el año y solamente se aprovecha el agua de la temporada de lluvias.
Se deben seguir los siguientes pasos:
Existen diferentes áreas de investigación tecnológica y distintas maneras de percibir el desarrollo, esto de acuerdo a la orientación de cada sociedad y a los objetivos económicos, políticos y sociales planteados en cada comunidad, localidad, región o país.
Tomando en cuenta la realidad andina, cualquier tecnología será apropiada si ésta se desarrolla o se transfiere de acuerdo a la disponibilidad de recursos locales, si se evitan los gastos innecesarios, si se priorizan las necesidades más importantes de la población, si se define claramente el coste-beneficio con relación a su implementación y si se logra satisfacer las necesidades más urgentes de la población mejorando su nivel de vida.
El desarrollo tecnológico o la transferencia de una tecnología, para que pueda tener la categoría de “apropiada”, deberá darse solo después de un exhaustivo análisis y valoración respecto a cada contexto, sin caer en la tentación de importar modas o técnicas que seguramente responden a otra realidad cultural, social, económica o medioambiental.
Existen distintos tipos de tecnologías apropiadas pero son aquellas, las que se relacionan con el desarrollo sostenible de hábitats ecológicos, que nos interesa implementar, sistematizar y difundir. Las áreas identificadas hasta el momento con relación al desarrollo o la transferencia tecnológica son:
CEETyDeS viene trabajando para impulsar la creación de centros demostrativos de tecnología apropiada andina localizados en distintos pisos altitudinales andinos cuya función será la de realizar investigaciones científicas y técnicas adaptadas a su contexto, sistematizar y difundir información para el desarrollo sostenible y llevar adelante programas de capacitación profesional y técnica.